Gracias a la donación particular de la pintura "Santiago el Mayor", atribuida a Cristóbal de Villalpando , el Museo Regional de Querétaro enriquece su colección a 10 obras, de una serie de 12 pinturas, sobre el tema de los apóstoles que acompañaron a Jesús durante sus predicaciones, de acuerdo con la Biblia.

Esta donación resulta relevante, ya que en este museo del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) se conservaban nueve pinturas, de una serie de 12, realizadas por el destacado artista novohispano, además de que ahora se obtiene una lectura más completa de un tema importante y desarrollado durante el periodo virreinal.

La información sobre la procedencia de esta serie de pinturas proviene del historiador Francisco de la Maza, quien consignó que se hizo para el Convento El Carmen, en la ciudad de Querétaro.

Las obras estuvieron a principios del siglo XX en la que fuera la Academia de Bellas Artes , en dicha ciudad, para pasar después al acervo del museo que fundara Germán Patiño y que desde hace 81 años se conoce como el Museo Regional de Querétaro.

De las nueve pinturas realizadas por De Villalpando que resguarda el museo, siete están firmadas sólo con su apellido, mientras que las otras dos, más la que se recibe en donación, se infiere su atribución por la técnica de manufactura, estilo, composición y representación.

Estas pinturas se basaron en los grabados que hizo el pintor flamenco Pedro Pablo Rubens , a petición del duque de Lerma hacia 1611. De Villalpando los reproduce casi igual y les imprime su propio estilo claroscuro y vigoroso. La serie original de Rubens está bajo resguardo del Museo de El Prado , en Madrid.

De Cristóbal de Villalpando se sabe que nació en la Ciudad de México hacia 1649 y murió en la misma, en 1714. Es considerado el último gran pintor del periodo barroco, se distinguió por el manejo suelto en el dibujo y sobre todo, por sus audaces composiciones, llenas de color y luz.

Su primer trabajo localizado se encuentra en el retablo mayor del ex convento franciscano de San Martín de Tours , en Huaquechula, Puebla (1675), que resguarda 17 lienzos dedicados a los santos franciscanos, ocho sobre la vida de la Virgen y un Cristo crucificado. En la Ciudad de México destacan las obras realizadas en los retablos de Azcapotzalco (1681) y el Retablo de Ánimas, en Xochimilco, y sobre todo, los lienzos realizados para la Catedral de México (1685) con temas alusivos a San Miguel, la Virgen del Apocalipsis y la Iglesia militante y triunfante.

En la Catedral de Puebla hizo pinturas murales en la cúpula con el tema Apoteosis de la Eucaristía (1688). En el convento franciscano de la Ciudad de Antigua, en Guatemala, pintó 49 lienzos sobre la vida de san Francisco de Asís.

De Villalpando es reconocido también por representar a los ángeles y arcángeles, entre otros temas. Entre sus últimos trabajos, se encuentra la serie sobre la vida de San Ignacio de Loyola que pintó para el colegio jesuita de Tepotzotlán, en el Estado de México.

Los historiadores del arte consideran que De Villalpando alcanzó plenitud artística entre 1690 y 1710. Periodo en el que intensifica los colores verdes, azules y bermellones, enriquece los matices ricos en veladuras, causando gran impacto en las composiciones, algunos de los cuadros de este periodo pueden admirarse en la pinacoteca de La Profesa, en la Ciudad de México.

El donador de la pintura "Santiago el Mayor", César H. González Mejía , indicó que compró la pintura en los años sesenta, la mandó restaurar y después de indagaciones, supo que existía un apostolado en el Museo Regional de Querétaro. El interés de la donación responde a que la pintura se integre al resto del conjunto, coadyuvando con INAH en el rescate, conservación, protección y difusión del patrimonio cultural.

La donación se formalizó en una reunión a la que asistieron Diego Prieto Hernández, director general del INAH; José Muñoz Bonilla, coordinador nacional de Centros INAH; Rosa Estela Reyes García, directora del Centro INAH Querétaro; Bernardo Sarvide Primo, director del Museo Regional de Querétaro; y el coleccionista César H. González Mejía, informa en un comunicado el INAH.

nrv

Google News

Noticias según tus intereses