Está programado que en la “mañanera” de Andrés Manuel López Obrador de este lunes, el director de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Manuel Bartlett, explique cómo se llevará cabo el Plan Nacional de Energía Eléctrica presentado por el presidente el 9 de diciembre. Se trata de un tema clave para el país, pero existen temores de que los funcionarios del sector no muestren capacidad de enfrentar los desafíos existentes.

Bartlett Díaz, con una carrera política de casi seis décadas (lo que incluye dos secretarías de Estado, una gubernatura y posiciones parlamentarias relevantes), anunció ayer en sus redes que dará a conocer “cifras y nombres” de empresas que dañaron a la CFE con actos de corrupción. Es deseable que lo haga, pero no si ello resulta una cortina de humo que le evite explicar, por ejemplo, de dónde saldrán al menos 4 mil millones de dólares de inversión este año para evitar que el país encare una creciente escasez de electricidad, según expertos consultados por este espacio.

Sería pertinente que el titular de la CFE desahogara en esta oportunidad, entre otras, al menos las siguientes preguntas:

1.- ¿Hay huachicoleo eléctrico?. De acuerdo con cifras oficiales (Programa de Desarrollo del Sistema Eléctrico), la CFE encaró en 2017 mermas en sus ingresos superiores a 30 mil millones de pesos por las llamadas “pérdidas no técnicas”, que provocan el robo de energía, “diablitos” y falta de pago. Esas pérdidas se “socializan”, se dice en el sector, mediante ajustes en tarifas aplicadas a los usuarios, incluso las que aplican proveedores privados.

2.- ¿Sufriremos apagones masivos? En 2017 se generaron 329,162 GWh de energía eléctrica, 3.1% más que en 2016. Se calcula que la demanda para 2019 superará los 328,000 GWh. López Obrador ha dicho que “existe suficiente electricidad”, pero eso depende de que realmente se produzca, por parte de la CFE o de los privados. La empresa estatal sólo tendrá capacidad, en el mejor de los casos, de generar la mitad.

3.- ¿Energía limpia o sucia? López Obrador ha ofrecido que aumentará la producción de energía limpia, apoyada en nuevas tecnologías. El 78.9% de la electricidad que se genera proviene del uso de combustóleo, carbón y gas, lo que en los dos primeros casos es altamente contaminante -el mundo se está alejando de esos procedimientos. El tercero, el gas, resulta cada vez más caro. ¿Cómo incrementar la generación de energía hidroeléctrica, geotérmica, eólica o nuclear, que hoy solo representa 21.1% del total?

4.- ¿Se han ido los corruptos de la CFE? La gestión de Enrique Ochoa al frente de la empresa (2014-2016) estuvo acompañada de señalamientos de corrupción. Uno de los personajes recurrentes en estas historias fue el ex director de Administración, Héctor de la Cruz Ostos. Reportes de la Auditoría Superior de la Federación le atribuyeron en 2017 desvíos en el programa de renta de aeronaves, algunas de las cuales fueron presuntamente usadas para atender viajes de placer de dirigentes del sindicato que encabeza Víctor Fuentes del Villar. En estas mismas páginas el columnista Alberto Barranco reveló una auditoría interna que cuestionó contratos por 4,000 millones de pesos para renta de vehículos, bajo responsabilidad de De la Cruz Ostos. Éste ya no ostenta su anterior cargo, pero se le ubica como asesor cercano de Bartlett Díaz, y varios de sus cercanos han sido colocados en posiciones clave.

5.- ¿Hay complicidad con el SME? En 2013, alegando un mandato judicial, la administración Peña Nieto firmó un convenio con el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), a cargo de Martín Esparza, que le otorgó una supuesta indemnización por miles de millones de pesos en bienes (plantas generadoras de electricidad, terrenos, edificios) con lo que virtualmente revirtió la cancelación de nexos laborales impuesta en octubre de 2009 por Felipe Calderón con la extinción de la Compañía de Luz y Fuerza del Centro. El equipo de Peña cobijó una alianza del SME con un consorcio extranjero y empresarios mexiquenses para crear una empresa generadora de electricidad. Dos titulares de Gobernación, Miguel Osorio y Alfonso Navarrete Prida, presionaron a la CFE, infructuosamente, para que comprara electricidad a la nueva corporación de los otrora sindicalistas, a precios por arriba de mercado.

En este mismo ámbito, ¿por qué la CFE ha permitido, sin explicación de por medio, que el propio SME invada el terreno propiedad de la empresa estatal ubicado en Zúrich 214 de la Ciudad de México, en la exclusiva zona de Nuevo Polanco, a unos pasos de Plaza Carso? El predio ha sido puesto en venta subrepticiamente, y se estima que su precio puede superar los 500 millones de pesos.

rockroberto@gmail.com

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses