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El embajador estadounidense Robert Lighthizer aceptó que el TLCAN es un “muy importante acuerdo” para Estados Unidos y que el gobierno de su país está comprometido para llevar adelante su modernización.

Contrario a discursos previos con amenazas de que si no logra un resultado “equilibrado” y “justo” en la renegociación, Estados Unidos saldría del acuerdo, el funcionario se comprometió a trabajar “muy duro” de aquí a que inicie la séptima ronda de renegociación.

No obstante, reiteró que se mantienen sus mismas propuestas sobre la mesa, porque las llamadas “ideas creativas” de canadienses y mexicanos no van en el sentido de sus planteamientos.

Tras descartar el modificar su propuesta de subir las reglas de origen del sector automotriz de 62.5% a 85%, agregó que tampoco les gusta que la solución de controversias esté en manos de otras instancias.

Por ello, dijo que EU durante años dejó el litigio de disputas comerciales en manos de organismos internacionales, lo que no agrada a la actual administración.

De acuerdo con el representante comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer, por años el régimen comercial de su país estuvo en manos de la Organización Mundial del Comercio (OMC) y es por eso que ahora les preocupa tanto esa situación.

La propuesta del gobierno del presidente Donald Trump es no participar en los mecanismos de solución de controversias del TLCAN y llevar sus conflictos a sus propios tribunales.

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