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El capítulo agroalimentario da soporte a la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) al significar el voto duro del presidente Donald Trump, dijo Bosco de la Vega, líder del Consejo Nacional Agropecuario (CNA).

“El voto duro del presidente Donald Trump es la parte agroalimentaria; los productores de soya, maíz, trigo o de carne, es el voto duro del centro oeste de Estados Unidos. Entonces realmente la parte agrícola llevó su tiempo y estamos haciendo un muy buen trabajo”, expresó.

Durante el tercer día de la segunda ronda de negociaciones del TLCAN, De la Vega destacó que el capítulo cuenta con las mayores coincidencias por parte de los sectores públicos y privados de México, Estados Unidos y Canadá, por lo que considera hay una decisión de fortalecer los acuerdos.

“El [capítulo] agroalimentario desde la parte privada, ya lo hubiéramos cerrado y desde la parte pública, los tres secretarios están de acuerdo en avanzar a la velocidad que sea necesaria; agricultura yo lo veo como el gran soporte de la negociación.

“El sector agroalimentario público, los tres secretarios de agricultura y el sector privado, las tres organizaciones más importantes, estamos de acuerdo en fortalecer el TLCAN”, expresóBosco de la Vega.

Foco rojo. Al acudir para recibir el primer corte de caja sobre el avance de las negociaciones realizadas en un hotel de la zona de Polanco, en la Ciudad de México, Bosco de la Vega comentó que el foco rojo en la renegociación son el comportamiento y declaraciones del presidente Trump.

“Al sector agroalimentario lo que le ha preocupado realmente es que el presidente Donald [Trump], su personalidad no la liga a un estadista, a un jefe de Estado, eso preocupa”, dijo.

Explicó que no existe otro tema preocupante dentro del sector, aunque México busca nuevas oportunidades comerciales con otros países.

“México busca el tratado con Europa, traemos Sudamérica, Brasil y Argentina, tenemos Asia Pacífico y, próximamente el tema de Corea”, dijo.

Resaltó que México fue deficitario hasta 2015 en el sector y apenas el año pasado se registró un superávit de 4 mil millones de dólares, por lo que después de 20 años es un tema considerado fuera de discusión.

“México dijo que no aceptará que el déficit sea un tema de negociación y que el déficit lo vamos atacar expandiendo el comercio”, detalló.

Aclaró que el gobierno mexicano y los empresarios del sector están convencidos de que no aceptarán cuotas ni salvaguardas dentro de las negociaciones, porque México está a favor del libre comercio.

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