El finlandés Timo Mäkinen, uno de los grandes pilotos en la especialidad de los rallies, falleció el pasado 4 de mayo, a la edad de 79 años.

Su trayectoria fue impresionante. Mäkinen destacó como pocos en la época que vio nacer a los ‘finlandeses voladores’. Manejaba con un estilo diferente, al pisar el acelerador a fondo con el pie derecho y con el  izquierdo el freno, sin dejar de dar gas ni un segundo. Controlaba el auto al derrapar con la parte trasera: al entrar y salir de las curvas, aplicaba  el freno de mano y ganaba valiosas milésimas de segundo. ¿Cómo obtuvo este conocimiento? Manejando en caminos cubiertos de nieve,  con un movimiento frenético de manos sobre el volante.

Timo destacó durante los años sesenta y setenta. Nació en Helsinki en 1938 y ganó el fantástico Rally de la Gran Bretaña en 1973, 1974 y 1975, manejando un  Ford. Pero años antes ya era leyenda al ganar en un Mini Cooper S, en Monte Carlo, en 1965, 1966 y 1967, así como la competencia de los Mil Lagos en Finlandia (1967). Ganó el Rally de la Costa de Marfil en un Peugeot 504 V6. Recuerdo que era la época en que los pilotos usaban un overol y abajo conservaban la camisa y corbata de vestir; además, los autos solo usaban el número de competencia, sin publicidad.

Por cierto, el piloto mexicano Francisco Name  tomó un curso para aprender el tipo de manejo que mencionamos arriba; me comentó en su salida a Europa que este tipo de enseñanzas otorga mucha sabiduría sobre tierra, nieve y asfalto. Francisco competirá este año en diferentes países, como Portugal, Italia, Alemania, España e Inglaterra, en un Citroën DS3. ¡Suerte, Paco!
Además, déjenme recordarles que otro finlandés, Valtteri Bottas, logró un buen papel, el mejor, en Rusia. Esperamos que mañana, en el GP de España, no le fallen los frenos en la bajada a la entrada de los pits, donde seguramente los discos llegarán a grados de temperatura atroces, por el  uso excesivo, extremo, de los mismos. Llegan a ponerse completamente rojos.

¿Y qué ha pasado con ‘Checo’ Pérez? Bueno, durante las 14 últimas carreras ha tenido resultados positivos en puntos; él merece un gran reconocimiento por su valor y manejo. Ojalá mañana domingo siga en Top 10.

Y ya por último, en el tema que me encanta: Indianápolis. Hoy sabremos si  Fernando Alonso ocupará uno de los 33 lugares para competir en las 500 millas. Ya se ha visto que no es un reto menor para ningún piloto, aunque sea campeón mundial. Le deseamos suerte al  español.

¡Cómo han pasado los años!  ¡Qué cambio de imagen tan radical han sufrido autos y pilotos de cualquier categoría! En los años cincuenta y sesenta los automóviles tenían permitido llevar el logotipo de la marca al frente, el número de competencia a los costados, el nombre del piloto y nada más. Hoy es diferente: apenas se ven los números y el nombre del piloto; todo es publicidad, incluyendo el casco, nomex, guantes, zapatos. Todo el espacio disponible es para el patrocinio.

No quiero terminar este texto sin narrarles un caso maravilloso, muestra de que el automovilismo es capaz de despertar energías donde parecería difícil y motivar el deseo de competir. Nuestro amigo Salomón Toyber ha corrido en Karts desde muy pequeño, adaptando el volante, frenos y acelerador a su estilo de manejo. También lo ha hecho, en fechas recientes, con el auto que usa diario. Salomón sufrió de niño poliomielitis. Actualmente es el presidente vitalicio de la Federación de Kartismo. Es sin duda es un gran ejemplo a seguir.

Recuerden: hagan de su automóvil un deporte, no un peligro.

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