La corrupción es un fenómeno que indigna y molesta a la sociedad, que se expresa en actos ilícitos que debilitan el Estado de Derecho, enfatizó el presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, Luis Raúl Gonzalez Pérez.


Al inaugurar el Foro Corrupción y sus Implicaciones sobre el pleno goce y ejercicio de los derechos humanos, el ómbudsman nacional dijo que la corrupción atenta contra las instituciones democráticas y vulnera la dignidad humana. 


Acompañado por Arely Gómez, secretaria de la Función Pública; y Pedro Salazar Ugarte, director del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, el presidente de la CNDH indicó que la corrupción va desde entregar dinero a las autoridades, hasta el desvío de recursos públicos; esa acción compromete la capacidad del Estado para proveer de servicios y mejorar la infraestructura.


Explicó que, de acuerdo con una encuesta del INEGI en 2015, la corrupción se ubicó en segundo lugar de los problemas que más preocupan a la sociedad. En ese año la corrupción habría significado la pérdida de empleos y recursos públicos por el 9%  del PIB.


"Para muchos es una parte inherente del ejercicio del poder y que encuentra un entorno propicio para su desarrollo en las estructuras burocráticas sujetas a regulaciones ineficaces, poco transparentes y sin mecanismos reales de rendición de cuentas", sostuvo.


Luego de indicar que el problema en México no es algo nuevo, agregó que en la medida en que la corrupción se hace presente, se precariza el cumplimiento y la aplicación de la ley.

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