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El analista político Alfonso Zárate y los politólogos José Antonio Crespo y Alberto Aziz coincidieron en que la decisión de la presidenta nacional del PRD, Alejandra Barrales, de regresar al Senado —contraviniendo el estatuto del partido, porque se mantiene como dirigente—, fue un error que terminará en los tribunales y, sobre todo, ahondará la crisis del sol azteca.

En contraste, Fernando Dworak, maestro en Estudios Legislativos en la Universidad de Hull, Reino Unido, aseguró que no se viola el estatuto si esta decisión está basada en un acuerdo de las corrientes del partido para arreglar su falta de coordinador de bancada.

Zárate dijo: “Si el propio estatuto maneja la incompatibilidad de ser presidenta [del partido] y ocupar un cargo de elección popular, es volver a cometer otro error. Seguro puede ser impugnable. Es ir en un tobogán en el que una mala decisión sigue a otra pésima y no se le ve una salida decorosa”.

El experto dijo que existe una fuerte presión que se ha ejercido sobre Barrales, no sólo por la situación que vive el PRD, “que creo que es el peor momento de la historia del partido, pues se está desfondando en beneficio de Morena y ocupando un lugar marginal”.

Para el investigador del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS), Alberto Aziz Nassif, la decisión de Barrales generará mayor división en el partido y es impugnable, según los estatutos.

Detalló que lo que pasa en el Senado es un proceso absurdo, consecuencia de la división interna provocada por la separación de Miguel Barbosa: “El partido ha ido entrampándose en un proceso absurdo porque se han tratado de castigar, le aplicaron todo el rigor burocrático del PRD a un senador”.

José Antonio Crespo aseguró que Barrales y Los Chuchos hicieron mucho más grande el problema que la declaración de Barbosa de apoyar a López Obrador rumbo a 2018 al quitarlo como coordinador de la forma en que lo han hecho.

“Están acelerando la descomposición del PRD por ese asunto mal manejado y ahora Barrales incurre en una falta del reglamento o de los estatutos. Con la clara intención de sacar a Barbosa del partido están incrementando el problema y acelerando la ruptura del PRD. Pero la responsabilidad es de Barrales y los dirigentes del PRD”, dijo.

Fernando Dworak afirmó que Barrales tiene tejido el acuerdo con su Consejo Político y no habrá problema, en todo caso será un disenso interno, pero no un tema legal.

“Lo peor que podría pasar es que Barbosa o algún otro disidente reclame a los órganos internos del partido. Ahí el PRD tendrá que procesarlo y si no hay consenso, podría escalar en el tribunal electoral, pero no le veo ningún un problema insalvable”, opinó.

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