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politica@eluniversal.com.mx
Un grupo de constituyentes entregó este jueves a la Cámara de Diputados, un ejemplar de la nueva Constitución de la Ciudad de México que fue concluida apenas el pasado 31 de enero.
En una ceremonia, el presidente de la Asamblea Constituyente, Alejandro Encinas, entregó el ejemplar, que firmaron distintos legisladores, a su homólogo de la Cámara de Diputados, el panista Javier Bolaños.
Bolaños Aguilar sostuvo que con la concreción del texto constitucional que le da autonomía a la capital del país, la Asamblea Constituyente ha enaltecido la política como el mejor instrumento para generar el bien común.
“Han enaltecido la política, entendida como el mejor instrumento para generar bien común y como la disposición de escuchar con respeto al de enfrente aunque no pensemos igual, pero sobre todo la convicción de poner los intereses de las mayorías sobre los intereses legítimos particulares o de grupo”, indicó.
Destacó la importancia de saber que en una lucha democrática hay batallas que se ganan y otras que se pierden, pero sin nunca traicionar las ideologías y las trayectorias, el objetivo es siempre buscar el mejor elemento legislativo, jurídico para darle curso, en este caso, a la Ciudad de México.
“La política no es cosa de juego ni de ocurrencias, debemos estar dispuestos a tomar decisiones aunque no sean populares, pero nunca tomar decisiones para ganar una buena columna o una buena nota, eso en nada ayuda a esta noble labor que es la profesión de la política”, apuntó.
El diputado presidente felicitó a Encinas Rodríguez por la conducción, trabajo y esfuerzo para elaborar la Carta Magna. “Concretar acuerdos por mayoría calificada se dice fácil, pero se requiere de una gran disposición y alta capacidad y ahora serán los ciudadanos quienes califiquen el trabajo y los consignen en el lugar que les va a corresponder en la historia del país”, añadió.
Encinas Rodríguez sostuvo que el documento constitucional de la Ciudad de México es un texto de avanzada, progresista, liberal, que refleja las preocupaciones y aspiraciones de los capitalinos, bajo tres ámbitos: la ciudadanía, la comunidad y el ejercicio pleno de derechos, teniendo al territorio como el eje articulador de todas las políticas públicas.
