Familiares del fotoperiodista Rubén Espinosa confirmaron que su cuerpo se encuentra entre los hallados la noche del viernes en un departamento de la colonia Narvarte.

Sin dar testimonio al respecto, más que sólo pedir apoyo y comprensión, la familia del fotoperiodista, corresponsal de la revista Proceso y de las agencias Cuartoscuro y AVC, salió de las instalaciones de la Fiscalía de Homicidios de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal.

Afuera de la Fiscalía de Homicidios, colegas del fotoperiodista Rubén Espinosa esperan a que sea entregado su cuerpo.

El 9 de junio llegó a la Ciudad de México procedente de Veracruz, donde afirmaba que fue acosado. Aquí fue auxiliado por diversas organizaciones sociales que apoyan periodistas.

El jueves 30 acudió a una reunión con un grupo de amigos en la colonia Narvarte. Por la tarde se comunicó con uno de sus colegas, eso fue lo último que supieron de Rubén.

La mañana de este sábado la hermana de Ruben comenzó a contactarse con personas cercanas, pero nadie sabía de el. Se dio aviso a distintas organizaciones para difundir la desaparición.

Uno de los amigos que estuvo en la reunión logró comunicarse con su hermana. Le dio parte de su paradero y decidieron ir al lugar de la fiesta.

Cuando llegaron la zona ya estaba resguardada.

A las 15:00 horas personal de la PGJDF llamó a los familiares y solicitaron que fueran a reconocer el cuerpo. Ahí se confirmó que se trataba del fotoperiodista.

La familia realizó la denuncia correspondiente a la Fiscalía de Homicidios.

Hasta el momento, la Procuraduría capitalina no ha dado más información sobre el tema y según los amigos de Rubén, tampoco a realizado las indagatorias correspondientes, no han llamado a los últimos contactos ni a los vecinos.

ml

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