Pili Hussein trabajó
por 10 años las minas de Mererani, un pequeño poblado de Tanzania, donde no se aceptan mujeres. Conocida como el "tío Hussein", Pili incluso se hizo rica y logró montar una empresa.
A los 31 años escapó de un marido abusivo y se dirigió a Mererani, en las faldas del Kilimanjaro. Allí observó, en secreto, cómo extraían la tanzanita, un piedra preciosa que sólo se encuentra en la región.
Permanecía en la mina entre 10 y 12 horas diarias en busca de gemas preciosas, relató Hussein a ONU Mujeres para su reporte "From where I stand: 'I became a man, just to access the mines'”.
Después de un año, se hizo rica al descubrir dos enormes concentraciones de piedras preciosas. Con dicho recurso, compró más herramientas y empezó a contratar mineros para que trabajaran para ella.
Pili Hussein afirmó se siente orgullosa de lo logrado pues tiene a 70 empleados trabajando para ella, poseé 150 acres de tierra, 100 vacas y un tractor. Además, 32 niños intergantes de su familia han acudido a la escuela gracias a ella.
La historia de Pili se conoció gracias a su participación en el reporte " Mapeo sobre el género y las industrias extractivas en Tanzania" realizado por ONU Mujeres.
"Quiero trabajar con mujeres jóvenes y enseñarles cómo hacer negocios en el sector minero. Nunca tuve a nadie que me guiara y tuve que vivir con una falsa identidad como hombre para poder ingresar a las minas. No tiene que ser así para la siguiente generación", dijo para ONU Mujeres.
La serie de ONU Mujeres " Desde donde estoy" (From where I stand) relata en primera persona los logros de muchas mujeres que han cambiado los principios de inequidad en las comunidades que habitan.
cev