Por segundo día consecutivo, Estados Unidos interceptó ayer en la Zona de Defensa Aérea e Identificación de Alaska (ADIZ por sus siglas en inglés) dos bombarderos rusos tipo TU-95, de acuerdo con información dada a conocer por funcionarios de defensa estadounidenses a la cadena CNN.

En respuesta, Estados Unidos envió el avión E-3. El bombardero ruso más cercano se encontraba a unas 36 millas náuticas de la costa de Alaska y voló a 745 millas náuticas al suroeste de Anchorage.

Es el segundo incidente de este tipo en este semana, ya que el pasado lunes dos aviones caza de EU interceptaron por la noche dos bombarderos rusos del mismo modelo, los cuales se aproximaron a unos 160 kilómetros de la isla de Kodiak, aunque no violaron el espacio aéreo estadounidense.

Esas aeronaves tienen capacidad para transportar armas atómicas, aunque no parecía que los dos TU-95 interceptados el lunes portaran ese tipo de armamento, de acuerdo con un portavoz del Pentágono.

En ese momento fuentes militares calificaron el hecho de “nada fuera de lo ordinario” y “nada diferente a lo que hemos visto en el pasado respecto a la aviación rusa de largo alcance”.

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