“Londres, blanco del EI desde 2016”

Luego de París, Bruselas y Berlín, era cuestión de tiempo para incluir a Londres en la lista negra de blancos golpeados por la yihad, asegura Evgenia Gvozdeva, experta en terrorismo del Centro de Seguridad e Inteligencia Estratégica Europea (ESISC por sus siglas en inglés).

“Durante años el Estado Islámico (EI) ha considerado a Londres como un objetivo prioritario y ante las grandes pérdidas sufridas por la organización terrorista en Irak y Siria, para el EI era extremadamente importante realizar un espectacular ataque terrorista en contra de un objetivo estratégico y en un país que hasta ahora no había sido golpeado por la organización. Ese objetivo fue logrado el miércoles”, dice la investigadora a EL UNIVERSAL.

En entrevista, Gvozdeva habla sobre el manual operativo diseñado por el Estado Islámico para crear un clima de inseguridad y miedo en Europa, así como del reto que representa para los servicios de inteligencia y seguridad la amenaza de los lobos solitarios.

¿Identifica algún elemento novedoso en el ataque de Londres en comparación con los registrados en Europa, desde París?

—Por el contrario, el ataque contiene todas las “marcas” clásicas del Estado Islámico. Este modus operandi consiste en ataque con vehículo y con cuchillo. Ambos métodos fueron recomendados por el EI a sus seguidores en Europa Occidental a través de su propaganda divulgada en los últimos meses. Las últimas ediciones de su “revista” Al Rumiya, en los rubros “tácticas de terror”, muestran las líneas directrices concretas sobre cómo llevar a cabo ataques con coches y cuchillos.

En los atentados de Niza, Berlín y París-Orly fue sólo un individuo el responsable de causar terror. Al parecer, el ataque de Londres fue realizado también por un lobo solitario y no por una célula coordinada. ¿Por qué ya no estamos viendo comandos armados hasta los dientes como ocurrió en París y Bruselas?

—El Estado Islámico adapta constantemente su estrategia al entorno cambiante en los países señalados como blancos. Y el actual modus operandi no necesita ninguna coordinación, ni explosivos o armas pesadas. El ataque de Londres parece ser una reacción a las numerosas llamadas emitidas por el Estado Islámico el año pasado. Si analizamos los videos y el material propagandístico la advertencia es clara: “Hoy atacamos París [y Bruselas], mañana será Roma o Londres”. Particularmente un video divulgado por el EI a principios de abril de 2016 amenaza específicamente al Reino Unido y contiene imágenes del Parlamento británico.

Desde los atentados de 2005, la policía de Londres venía preparándose para este momento. ¿Pudo evitarse el ataque?

—Para las fuerzas de seguridad es particularmente difícil evitar un ataque perpetrado por un lobo solitario, debido a que a menudo no tienen ningún vínculo real con las redes terroristas [internacionales] y suelen inspirarse en la propaganda en línea. Las autoridades británicas han frustrado en los últimos años más de 10 ataques terroristas, pero en ellos siempre hubo la presencia de armas y explosivos.

Entonces, ¿no se puede hacer nada ante los ataques cada vez menos sofisticados?

—Resulta prácticamente imposible prevenir este tipo de ataques con los instrumentos habituales de inteligencia, porque aun cuando se llega a identificar a una persona radicalizada, nunca se puede saber cuándo pasará a la siguiente etapa y saldrá a la calle a perpetrar un atentado suicida. Este tipo de ataques, usando un vehículo y un cuchillo, sin presencia de armas o explosivos, constituye el mayor desafío para los servicios de seguridad.

Lo único que se puede hacer al respecto es combatir la radicalización, contener la expansión de propaganda islamista en línea, centros religiosos y comunidades, y evitar que estos ataques inspiren a otros para ser imitados, como puede ser a través del manejo inteligente de las crisis, como se ha hecho en el caso de Londres.

El ataque de Londres tuvo lugar el mismo día en que Bruselas recordaba a las víctimas de los atentados de hace exactamente un año. ¿Coincidencia?

—Hasta el momento no hay datos que confirmen el vínculo entre los ataques de Bruselas y Londres. Pero hay que recordar que uno de los autores intelectuales de los ataques de Bruselas, Mohammed Abrini, viajó a Birmingham en julio de 2015. El autor de los ataques de París del 13 de noviembre de 2015, Abdelhamid Abaaoud, también viajó a Birmingham para mantener contactos aparentemente con miembros del EI. Como parte de las investigaciones relacionadas a Londres, se han realizado cateos en Birmingham.