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El gobierno de este municipio proyecta crear un museo para exhibir los vestigios prehispánicos hallados durante el remozamiento del centro, en coordinación con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).

La alcaldesa María Guadalupe Fernández Sánchez informó que el recinto se instalaría en el Instituto Municipal de la Juventud, ubicado en el edificio del ex palacio municipal.

Indicó que las piezas recuperadas durante obras de rehabilitación del centro municipal son restauradas por personal del INAH y que el gobierno municipal está obligado a hacer un museo para su resguardo.

Mencionó que los vestigios prehispánicos hallados son de suma importancia, sobre todo los sahumadores, que por su manufactura y cantidad son similares a los encontrados en el Templo Mayor de la Ciudad de México, lo que confirma que Cuautitlán fue un sitio ceremonial.

Fernández Sánchez reiteró que el gobierno municipal mantiene pláticas con el INAH para la creación del museo, ya que se requieren condiciones especiales para el resguardo y conservación de las piezas.

Afirmó que arquitectos del ayuntamiento trabajan en la elaboración de proyectos para el recinto.

Jorge Ernesto Rodríguez Fragoso, cronista de Cuautitlán, dijo que el museo albergará solamente las piezas halladas durante los trabajos de remoción del centro municipal, pues existen otras piezas halladas en El Cerrito, donde existen vestigios de la vivienda que ocuparon San Juan Diego y su tío Juan Bernardino, que serán exhibidas en ese lugar.

Los restauradores del Instituto Nacional de Antropología e Historia efectuaron un gran trabajo y las piezas recuperaron su belleza original, dijo.

Durante las obras de remoción del centro municipal, efectuadas entre mayo y julio del 2016, fueron hallados más de mil 500 vestigios prehispánicos, sobre todo vasijas y huesos, además de restos de casas habitación.

Destacan 26 sahumadores prehispánicos completos y cinco en fragmentos, hallados en calles aledañas al jardín principal, similares a los encontrados en el Templo Mayor.

Rescataron alrededor de 20 ollas Tláloc, de 10 centímetros de altura por ocho de diámetro; 12 vasijas estaban completas y el resto en fragmentos.

Actualmente, el ayuntamiento mantiene bajo resguardo las piezas que se recuperaron.

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