El magistrado de la Novena Sala Penal del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México, Maurilio Domínguez Cruz, denunció ante la Procuraduría General de Justicia local la suplantación de su identidad por parte de alguien que intentó hacer dos compras fraudulentas

Las compras se intentaron hacer en Segunda Mano y Mercado Libre, una por “equipo” con un valor de 270 mil pesos.

Sin embargo, dos llamadas a la oficina del magistrado pusieron al descubierto la suplantación de su identidad.

Durante la llamada para hacer una de las transacciones, según obra en la denuncia correspondiente (CI-FAE/B/UI-3C/D/00095/03-2017), al vendedor, un abogado, le causó extrañeza las inconsistencias del delincuente en su intento por resultar convincente.

Afirmaba en sus llamadas que labora en el “Poder Judicial de la Federación”, que participa en quórums, que era muy cercano al magistrado Edgar Elías Azar, a quien, aseguraba, le podían hablar para corroborar con él su cercanía de “grandes amigos”.

Incluso a uno de los vendedores le dijo que podía ayudar a su hijo –estudiante de derecho- a entrar a laborar en el Poder Judicial.

La trama de fraude y suplantación de identidad quedó al descubierto del magistrado, gracias a dos llamadas que le realizaron a su oficina en el órgano judicial capitalino.

La primera, el 10 de marzo pasado. Patricia (N) solicitaba el registro federal de causantes del magistrado, para elaborar la factura de unas “cosas” que había comprado en Oaxaca.

Pero el magistrado pidió comentarle a uno de sus colaboradores a Patricia (N) que él no había realizado ninguna compra de esa naturaleza.

Una segunda llamada se recibió en la Sala del magistrado tres días después, es decir, el 13 de marzo pasado. Esta vez, de un abogado que ofreció un producto (no se especifica qué) en Mercado Libre, y al que el mismo defraudador intentó estafar suplantado, una vez más, la identidad del funcionario judicial.

tcm

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