"El consumo medido de alcohol ayuda a que una persona mejore su apariencia, lo que hace que resulte más atractivo para el resto de las personas", de acuerdo con un estudio presentado por la Universidad de Bristol, en el Reino Unido.

Los investigadores tomaron un grupo de 40 estudiantes y les dieron alcohol. La ingesta ligera no sólo hacía que los sujetos vieran a terceros como más atractivos, sino que las personas que consumieron moderadamente, lucían más atractivos para el resto.

Las principales razones de esto, para ellos, es que la ingesta moderada produce una vasodilatación que da un sonrojado en la cara. Además, también genera una postura más relajada, descontracturada y una tendencia a tener mejor humor.

Pero según los investigadores, todas estas "ventajas" sólo se dan en caso de consumo moderado.

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