Burdeos no sólo es la zona vinícola más extensa de Francia. Esta región, plagada de historia y tradiciones que hoy se replican sin cesar en bodegas de todo el planeta  también es la más famosa del mundo, considerada La Meca de los grandes vinos para especialistas y amantes de los fermentados de uva.
Con el propósito de mostrar la diversidad de estilos que confluyen en la región y revivir el interés de los consumidores nacionales por las etiquetas de Francia, La Europea realizó la segunda edición de los Grandes Châteaux de Bordeaux. A lo largo de tres días, enólogos y vinateros de algunas de las bodegas más emblemáticas de la apelación francesa ofrecieron degustaciones y maridajes en diferentes puntos de la CDMX.
 Château de Camensac, Château Pédesclaux, Château Brane-Cantenac, Château Mouton
 Rothschild y los vinos de Domaine Clarence Dillon, con Château Haut-Brion como etiqueta estelar, formaron parte del ejercicio, realizado en colaboración con InterAmericana. Jean-Philippe Delmas, director general adjunto de Domaine Clarence Dillon, fue el encargado de abrir la serie de catas en las instalaciones de Lipp La Brasserie. “México es un mercado bastante importante para los vinos de Burdeos. Estamos presentes en más de 60 mercados del mundo y México, definitivamente, se cuenta en el top 10,” apuntó. 
De acuerdo con Delmas, la imagen de Burdeos como una zona dedicada a la producción de vinos de alta gama está bien posicionada entre los consumidores nacionales; sin embargo, es necesario entender que la región tiene mucho más que ofrecer. “Burdeos también se trata de vinos accesibles, de muy alta calidad, diversos y avalados por algunos de los más grandes châteaux. Los rosados, por ejemplo, son un tema importante para nosotros. Una de las mayores dificultades que enfrentamos hoy en día es que Burdeos se percibe sólo como una región productora de vinos tintos, mientras que sus blancos y rosados, que existen desde hace mucho tiempo, son poco reconocidos.”

Durante la cata ofrecida por Delmas, especial interés provocaron los vinos Le Clarté de Haut-Brion 2013, mezcla de Sémillon y Sauvignon Blanc con 10 meses de envejecimiento en barrica; La Chapelle de La Mission Haut-Brion 2011, tinto de mezcla bordelesa (Cabernet Sauvignon, Merlot y Cabernet Franc); Château Haut-Brion 2004, repleto de notas de frutos rojos, minerales, madera y humo, y el Château Quintus 2012, producido en Saint-Émilion y la última adquisición de Domaine Clarence Dillon. Para constatar la calidad de los rosados de Burdeos, Delmas presentó el Clarendelle Rosé 2015, elaborado a partir de Merlot, Cabernet Sauvignon y Cabernet Franc. El fermentado, de color salmón, destaca por sus aromas de frutos rojos, agradable frescura, matices gustativos de bayas silvestres y excelente relación precio-calidad.

Conoce las distintas caras de los vinos de Burdeos
Conoce las distintas caras de los vinos de Burdeos

 $460.00
En La Europea

Clarendelle Rosé 2015
Merlot, Cabernet Sauvingnon y Cabernet Franc.
Zona de producción:   Burdeos, Francia.
Vista: un rosado que se distingue por su color salmón con destellos anaranjados pálidos.
Nariz: su paleta aromática incluye dejos de frutos rojos, con algo de litchi y agradable frescura. 
Boca: su paso por boca es aterciopelado, elegante, con notas de bayas silvestres y un final largo.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses