La cereza del pastel, frase popular con la que se habla de los privilegios que puede traer cierto acontecimiento. Sin embargo, ¿qué es lo que se sabe acerca de este fruto y sus propiedades?, ¿cómo puede ayudar a nuestro cuerpo? y ¿por qué debemos comerla?

A continuación, algunas bondades que proporciona a nuestra vida el consumo de las cerezas.

Elimina la grasa del abdomen

En 2013, investigadores chinos encontraron las antocianinas, un compuesto de la cereza, que ayuda con la eliminación de grasa que se localiza alrededor del vientre.

Efectivas para dormir

La cereza contiene altos niveles de melatonina, hormona fundamental en la actividad del sueño, por lo cual el consumo constante de esta fruta puede ayudar en la calidad del sueño.

Buenas para el ejercicio

De acuerdo con el doctor Kerry Kuehl, especialista en medicina deportiva de la Universidad de Salud y Ciencia de Oregón, la cereza trae como consecuencia un alivio en el dolor después de una jornada intensa de ejercicio.

Esto se comprobó después de que el doctor realizara un estudio donde 55 corredores bebieron jugo de cereza mientras se preparaban para una carrera de larga distancia. Al finalizar los entrenamientos, los deportistas experimentaron menos dolor.

Las personas que ejercitan su cuerpo, con frecuencia toman analgésicos previo al entrenamiento con el objetivo de reducir las molestias al finalizar, no obstante, Kuehl advierte que este tipo de medicamentos pueden afectar seriamente el estómago a largo plazo.

Agrega que la cereza, además de disminuir las molestias en los músculos después del ejercicio, también apoya en la resolución de problemas intestinales como la desinflamación del estómago.

Ataca la artritis

Otra de las ganancias de comer cereza se puede ver en la disminución de los niveles de óxido nítrico en la sangre, es decir, la reducción del compuesto que se vincula con el desarrollo de la artritis.

El estudio proveniente de la Universidad de Oregón, encontró que las mujeres que padecían osteoartritis, al tomar jugo de cereza dos veces a la semana por tres semanas, tuvieron una desinflamación significativa en la sangre. También sufrieron 20 por ciento menos dolor.

Los investigadores afirman que las cerezas contienen el contenido antiinflamatorio más alto que cualquier otro alimento, esto en el caso de las que son ácidas.

Contra enfermedades del corazón

La antocianina, abundante en las cerezas, puede reducir el riesgo de adquirir enfermedades del corazón, pues disminuye la inflamación de éste, así como del nivel de grasa en el torrente sanguíneo.

Por otra parte, la investigación en el año 2013 por la Universidad de Michigan sugiere que las cerezas ácidas pueden, incluso, reducir el riesgo de accidente cerebrovascular cuando se toman con los medicamentos prescritos.

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