En medio de una crisis financiera que tiene a la Universidad Autónoma de Nayarit con un déficit de mil 50 millones de pesos, este miércoles el gobernador electo de Nayarit, Antonio Echevarría García, se reunió con el rector Ignacio Peña para escuchar las necesidades de la casa de estudios; sin embargo no se comprometió a entregar recursos extra a la institución educativa hasta no conocer la situación real de las finanzas estatales.

“Estamos en un proceso de entrega recepción, veremos cómo están las finanzas del gobierno del estado y en torno a eso se tomarán las decisiones (...) se platicará con el rector para ver que decisiones se tomarán”, señaló Echevarría.

El gobernador electo reconoció el esfuerzo que realizan las autoridades universitarias para sacar adelante el tema de los recursos para la Universidad y se comprometió a apoyar las gestiones que encabeza el rector Peña ante el gobierno federal para lograr la estabilidad financiera de la institución.

Además, durante el encuentro, que se desarrolló en las instalaciones de la rectoría, Echevarría pidió que sea la UAN quien diseñe el Plan Estatal de Desarrollo 2017-2021 a fin de garantizar un crecimiento integral de Nayarit.

"Creo en los universitarios, en su capacidad y visión; podemos confiar absolutamente esta y otras tareas", dijo.

Por su parte, Ignacio Peña explicó que la UAN requiere 500 millones de pesos para poder pagar la nómina y las presaciones de este año y de 550 millones más para solventar los pasivos fiscales.

Explicó que si de aquí a noviembre no se logran obtener recursos extraordinarios no se podrían cubrir los sueldos de los dos últimos meses, el pago de aguinaldos, los bonos para trabajadores administrativos y las primas de retiro para los pensionados.

El rector señaló que se han iniciado trabajos para llevar propuestas ante la SEP y solicitar más recursos e incluso se prepara un periodo de cabildeo con los legisladores federales.

El presupuesto anual de la UAN ronda los mil 600 millones de pesos de los que mil 311 llegan de la federación y 245 del gobierno estatal, el resto se obtiene de ingresos propios.

Cada año se destinan mil 800 millones de pesos a nómina, lo que representa un déficit permanente de 200 millones de pesos anuales.

El origen de este problema –ha explicado el rector Peña– tiene que ver con que la Universidad atiende a 30 mil alumnos en el estado con 15 preparatorias, 11 facultades, 36 licenciaturas y 25 posgrados, pero la Secretaría de Educación Pública no le reconoce el nivel medio superior, por lo que no toma en cuenta a esos estudiantes al momento de calcular el subsidio anual.

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