Realizan necropsia a manatí en playa

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El coordinador del Programa de Investigación y Conservación de Mamíferos Marinos de Yucatán, Raúl Díaz Gamboa, realizó junto con un equipo de estudiantes y especialistas de la Universidad Autónoma de Yucatán, (UADY) la necropsia en el puerto de Progreso del manatí que recaló cerca de las playas de Uaymitún. Asimismo, se practicó ese mismo procedimiento a un delfín que también fue encontrado en la costa yucateca.

Un equipo de estudiantes y especialistas realizaron una necropsia en dos ejemplares de mamíferos marinos que vararon recientemente en las costas de Yucatán, con el apoyo del equipo de ecología del puerto de Progreso y curiosos que pasaban por la zona donde se realizaron estas intervenciones.

Raúl Diaz recordó que en lo que va del año se han registrado en la entidad seis varamientos de animales marinos. Los especialistas le realizaron la necropsia a los restos del manatí que fue encontrado en la zona, cuando pobladores y vacacionistas fueron sorprendidos con el mamífero muerto en las orillas de esa playa.

Tras el hallazgo, Díaz Gamboa indicó que personal del departamento de ecología del puerto de Progreso aseguraron al organismo y lo trasladaron a dicho municipio para realizar las investigaciones correspondientes.

El manatí varado en la costa, según lo informado por el especialista, mide 2.48 metros de longitud, y pesa poco más de 300 kilogramos, no presentaba heridas externas, sin embargo, no se precisó la causa de muerte.

El especialista dijo es no muy común ver a manatís en costas yucatecas debido a que la población de estos animales estaba en peligro de extinción, sin embargo, en los últimos años se ha recuperado el número de estos ejemplares. “En Yucatán hay varios registros de esta especie, lo que no sabemos es que si están viviendo en la entidad o sólo están de paso para llegar a otros lugares del sureste de país”, indicó Díaz Gamboa.

Los resultados de la necropsia del ejemplar arrojaron que se trataba de un animal joven de 1.70 de largo, el cual murió por interacción humana, informó el especialista.

“El ejemplar murió por un enmallamiento por un arte de pesca que se denomina palangre, lo tenía alrededor de cuello e hizo que se cortara y desangrara”, comentó Díaz Gamboa.