El fiscal de Oaxaca, Héctor Joaquín Carrillo Ruiz, presentó ayer su renuncia al cargo, a través de un escrito entregado a la Oficialía Mayor de la Cámara de Diputados, a 18 meses de que culminara su periodo.

La renuncia “obedece a que he sido requerido para colaborar en otras responsabilidades”, afirmó en el oficio. De manera provisional, el vicefiscal Alberto Ramos Ramos quedó al frente de la dependencia.

El gobernador Alejandro Murat Hinojosa confirmó la dimisión. Dijo que su administración evalúa nombres para integrar una terna que se enviará al Congreso.

“Me voy satisfecho, pero no contento, hace falta mucho por hacer”, dijo Carrillo Ruiz, al hacer un balance de los logros y los pendientes durante su gestión.

Con la del fiscal, suman
tres renuncias en el gobierno estatal; las anteriores fueron del secretario General de Gobierno, Alejandro Avilés Álvarez, y de la directora del Instituto de la Juventud Oaxaqueña, Olivetti Paredes Zacarías.

Crearán terna. “Se estará evaluando a los que se postularán; el fiscal se incorpora a las tareas de gobierno; mi más amplio reconocimiento, es un gran oaxaqueño; en breve se reincorporará”, dijo Murat.

El ex fiscal aceptó que hay un rezago de 40% en expedientes, que se calcula en 20 mil; consideró que debe darse un incremento salarial para agentes de investigación y del Ministerio Público.

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