El obispo de San Cristóbal de las Casas, Felipe Arizmendi Esquivel, lamentó el homicidio de Miroslava Breach y pidió que éste no quede impune porque no se trata de un caso aislado, ya que varios periodistas han sido asesinados o amenazados por ejercer su profesión en México.

En rueda de prensa, el líder católico en Chiapas advirtió que es preocupante el giro violento contra los trabajadores de medios de comunicación.

“Cualquier asesinato es lamentable y preocupante, pero desde luego que nos impacta más cuando se trata de una persona de esta importancia, de este servicio”, precisó al referirse a la corresponsal del periódico La Jornada en Chihuahua.

Al enfatizar que se haga justicia y que no haya impunidad en torno al homicidio de la periodista, Felipe Arizmendi expresó que en materia de seguridad y garantías ciudadanas, no es nada más que el gobierno “haga más o que dé además seguridad porque es imposible que le pongan un guardia a cada quien y a veces éstos no son confiables”.

Más bien, consideró, lo que se necesita es trabajar en conjunto; primero en la familia, porque “muchos de estos asesinos a sueldo son gente sin familia o crecieron sin alguien que les dé una educación. No es asunto de pobreza, sino de falta de valores y de recursos”.

En esta aportación, el prelado planteó la alternativa para que el servicio del periodismo sea “una atención a la verdad y a la justicia” ya que podrá haber ocasiones en que se “difundan cosas sin fundamento y no se puede calumniar, hay que ser cuidadosos”.

“No estoy afirmando que estas personas hayan cometido esos errores, no, pero hay que advertirlo también”, enfatizó.

“Resulta que cuando se tocan intereses, todos corremos peligro. Los mismos sacerdotes y los obispos corremos riesgos, pero lo importante es la verdad y la justicia, y el pueblo quiere la verdad y la justicia”, dijo.

Preocupa también, aseveró, la impunidad con que en ocasiones se cometen esos delitos.

Expuso que a veces no hay pruebas suficientes, o por cuestiones o por deficiencias jurídicas en un proceso se deja libre a los culpables como se ha visto en muchos lugares.

Debe haber una revisión permanente del sistema jurídico; “no es posible que por una pequeña falta administrativa queden libres los que deberían estar encerrados para que no hagan más daño a la comunidad”.

Éste, puntualizó, es un trabajo integral y tenemos que preocuparnos más todos.

afcl

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