Cronica. “Ser gobernador se trata de servir a la gente”

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Aguascalientes. — El rostro de Emilio Berlié está radiante. Al centro de la primera fila de un megasalón donde caben 8 mil personas, charla con el dirigente nacional del Partido Acción Nacional (PAN), Ricardo Anaya, y llega también la ex primera dama Margarita Zavala, quien compartirá con ellos esta atmósfera política recargada de panistas, en la toma de posesión del gobernador Martín Orozco Sandoval.

Ágil, rápida, vivaz, esta dama alta, que anda en precampaña rumbo a las elecciones presidenciales de 2018, suelta con picor una petición al arzobispo emérito de Mérida: “Échele la bendición [al presidente del PAN]”, en respuesta recibe una sonrisa y un beso en la mejilla.

Luego, Margarita Zavala ocupa su lugar, al lado de la ex candidata panista a la Presidencia Josefina Vázquez Mota, y juntas, con una lluvia de comentarios mutuos, ven pasar la película de la toma de posesión de un segundo gobernador panista en un mismo día.

Emilio Berlié es el invitado principal en esta ceremonia. Oriundo de esta tierra de la “gente buena” ha venido de la Ciudad Blanca a ser testigo del rito en el que Orozco, hijo de un abarrotero, forjado en la política, después de recorrer los peldaños del poder, este día rendirá su protesta: “... Y si no, que el pueblo me lo demande”.

Lo solemne de la sesión del Congreso del estado se esfuma a las primeras palabras del gobernador, quien ha cantado el himno nacional con una expresión de felicidad y soltará expresiones coloquiales, poco políticas, como cuando bromea al gobernador priísta de Zacatecas, Alejandro Tello Cristerna: “Ya venía con el acta para llevarse a Aguascalientes”.

Es su estilo. Va a causar lágrimas de emoción en su padre, Melesio Orozco Bárcenas, cuando agradezca el esfuerzo de él y su madre, que ya no está con nosotros, pero desde donde se encuentra nos cuida y apoya a mí y a mis hermanos. También hablará del apoyo de su esposa y de sus hijos, y les dirá que ser gobenador se trata de servir, así que ahora, “simplemente creció la familia”.

Ahí está presente el primer gobernador panista de Aguascalientes, Felipe González González, y es reconocido por Orozco. “Quiera Dios” que le vaya bien al nuevo mandatario.

El que no vino fue el desde hoy ex gobernador Carlos Lozano de la Torre, a pesar de que aparecieron fotografiados en los periódicos en la entrega-recepción. “Si encuentro algo, no voy a decir nada, pero voy a dar un golpazo”, dijo Orozco. Son horas de marcar el estilo de gobierno.

Sí están los senadores por Aguascalientes: Angélica De la Peña (PRD), Miguel Romo Medina (PRI), Jesús Santana, suplente del gobernador, y el coordinador panista, Fernando Herrera, quien es presidente la la Jucopo. También asiste el presidente del Senado, Pablo Escudero Morales (PVEM).

Han venido ocho gobernadores panistas, cuatro del PRI y PRD, una veintena de senadores y otro tanto de diputados federales del mismo Acción Nacional, sin empacho de jugar en grupos antagónicos, a la vista de 2018.

Vienen de Veracruz, de un momento que los electrizó. “¡Uf!”, es la expresión de Fernando Herrera sobre el ambiente veracruzano, en tanto que Ignacio Cobo González, para muchos el amigo cercano de Carlos Slim, dice: “Aquí es el cielo, comparado con otros lados”.

Desde luego, Berlié a nadie bendice y cuando acaba la sesión, se desata una guerra de selfies. Quedan rodeados por simpatizantes, Margarita Zavala —¡Presidenta! ¡Presidenta!, le dicen—, y Ricardo Anaya, y la esposa del gobernador, Yolanda Ramírez, toma partido: “Échenle porras a Margarita”, invita.