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Dos elementos de la Policía Municipal de Puebla fueron retenidos, golpeados y posteriormente liberados por habitantes de una colonia inconformes porque fue decomisada una pipa presuntamente utilizada para el robo de combustible.
Durante horas, los dos agentes fueron declarados como desaparecidos, pero por la mañana se informó que aparecieron con golpes, aunque la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal aseguró que se encuentran en “óptimas condiciones de salud”.
Los hechos ocurrieron durante la madrugada en la colonia San Miguel Xonacatepec, donde elementos de la Policía Estatal aseguraron una pipa con reporte de robo y que presuntamente era utilizada para el hurto de combustible. El chofer quedó detenido.
Un grupo de pobladores retuvo la patrulla P-408 y a dos oficiales de la Policía Municipal, a quienes desarmaron y pretendían intercambiarlos por la unidad y el conductor.
Al no haber acuerdos, los inconformes se retiraron del lugar, por lo que los dos policías fueron declarados como desaparecidos.
Durante los operativos de búsqueda de los oficiales se logró ubicar un inmueble, donde había al menos seis camionetas cargadas con combustible de procedencia ilícita.
Y por la mañana fueron encontrados con vida, aunque golpeados, por lo que fueron trasladados al Hospital de Traumatología y Ortopedia.
La Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal informó que los elementos se encuentran en óptimo estado de salud, pero versiones policiales señalaron que ambos estaban muy golpeados.
Las bandas dedicadas a robo y comercialización de combustibles de ductos de la empresa Pemex se han vuelto cada vez más violentas en territorio poblano.
El 29 de octubre de 2015, pobladores de San José Bellavista retuvieron y desarmaron a personal del Ejército Mexicano y Seguridad Física de Petróleos Mexicanos (Pemex) para impedir que detuvieran unas camionetas que presuntamente trasladaban hidrocarburo robado.
El 16 de noviembre del mismo año, elementos del Ejército Mexicano fueron atacados a tiros por presuntos ladrones de hidrocarburo en la autopista Cuacnopalan-Oaxaca, a la altura de Palmar de Bravo.
El pasado 20 enero, elementos de Seguridad Física de Pemex y del Ejército Mexicano se enfrentaron nuevamente a balazos con presuntos ladrones de combustible en la comunidad de San José Bellavista.
Y el 3 de mayo, presuntos ladrones de combustible sorprendieron a balazos a policías federales, pertenecientes a la Gendarmería, quienes resguardaban una toma clandestina en Palmar de Bravo y tuvieron que repeler la agresión; sin embargo, fueron despojados de sus armas de cargo.
El último de los hechos más fuertes fue el 17 de octubre, cuando un grupo de sujetos encapuchados -presuntos huachicoleros- atacó a elementos del Ejército, quienes tenían instalado un retén en la carretera federal a Tehuacán, en el cruce con la autopista Puebla-Orizaba, a la altura del municipio de Esperanza.
spb
