En menos de dos horas, autoridades policiales localizaron a nueve personas ejecutadas en dos diferentes zonas limítrofes de Michoacán.

Del total de víctimas, tres fueron desmembradas y tres más decapitadas, cuyos restos fueron hallados en el municipio de Venustiano Carranza, informó la Procuraduría General de Justicia del Estado de Michoacán, y tres más en la Unión, confirmó su par del estado de Guerrero.

Primero, los cuerpos de seis personas fueron localizados al interior de un vehículo abandonado en una brecha de la localidad de San Gregorio, ubicada a la altura del kilómetro 10 de la carretera La Barca-Briseñas, en el municipio de Venustiano Carranza, de esa región colindante con el estado de Jalisco.

De acuerdo con la PGJE, minutos antes del hallazgo, personal de la Dirección de Investigación y Análisis de la Procuraduría del Estado que realizaba un recorrido en el municipio de Briseñas detectaron que un vehículo de transporte público ingresaba del municipio de La Barca, Jalisco, a Michoacán y que era seguido por un vehículo oscuro.

Tras percatarse que eran seguidos por personal policial, el taxi fue abandonado en la citada brecha, mientras que la otra unidad se internó en la localidad de Ibarra, de donde los presuntos criminales lograron darse a la fuga en dirección nuevamente al estado de Jalisco.

Posteriormente, sobre el kilómetro 272 de la Autopista Siglo 21, tres personas más también sin identificar fueron halladas sin vida, luego de ser ejecutadas a tiros y abandonadas a la altura de la comunidad de Agua Zarca, del municipio de Las Unión, Guerrero, en sus límites con Michoacán.

Los tres hombres presentaban disparos de arma de fuego, estaban maniatados y vendados de los ojos, además presentaban huellas de tortura.

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