Ante la aparición de más casos, continúan protocolo

Motozintla, Chis .— Primero fue el salpullido en los brazos, luego un calor que le enrojeció el rostro, ardores en las venas y dolor en las articulaciones, como si le oprimieran, describe Daymi Jaret Roblero Barrera, de 17 años de edad, la primera persona enferma de zika en la Sierra Madre.

Cuando la estudiante de cuarto semestre de la Preparatoria Del Mariscal llegó a la clínica del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), de inmediato le tomaron las muestras y el 11 de febrero ya le habían diagnosticado zika, según un documento que suscribe el subdirector en turno de la clínica, Edwin Hernández García.

La joven cuenta que durante tres días estuvo en cama, con hemorragia nasal, lo que preocupó a los médicos quienes le pidieron hacerse estudios de laboratorio para saber si tenía plaquetas bajas. “Lo bueno que no hubo clases. No dejé de ir a la escuela”, dice.

Desde el inicio de la enfermedad, Deymy Jaret tuvo dolor en las articulaciones y desde entonces presenta problemas para escribir, caminar y sostener objetos con las manos.

En el barrio San Antonio, donde vive la joven, no se ha registrado otro caso similar de la enfermedad, pero desde el 11 de febrero brigadistas del IMSS recorren casa por casa para hacer labores de descacharramiento y fumigación, ante el temor de que surjan más casos en Motozintla, cabecera distrital de la Sierra, ubicada a 782.5 metros sobre el nivel del mar que desde el inicio del año sus habitantes han resentido las bajas temperaturas.

Los habitantes de Motozintla dicen que no ha habido “más casos de zika, dengue o chikungunya”, por las bajas temperaturas de hasta 4 grados centígrados en la Sierra.

En la costa, las cosas son diferentes: desde noviembre en pueblos y ciudades decenas de personas fueron diezmadas por chikungunya, y ese mes supieron de la aparición del zika.

Mary “N”, cajera de una tienda, asegura que entre noviembre y diciembre, “todos los trabajadores del negocio estuvimos enfermos, pero aun así estuvimos trabajando”.

Desde noviembre, cuando se registró el primer caso de zika, que correspondió a un empleado del Servicio de Administración Tributaria (SAT), en el municipio de Huixtla el Sistema Nacional de Salud puso en marcha un operativo de fumigación y descacharramiento en varios municipios de la costa chiapaneca, que en 2015 tuvieron casos de chikungunya.

La temporada de calor no inicia, pero el Sistema Nacional de Salud sigue con el protocolo ante la aparición del zika en Chiapas, ubicado como la entidad con más casos, suma 45.

Además, cuatro embarazadas han enfermado de zika en los municipios de Mazatán, Villaflores, Pijijiapan y Tapachula, “ya diagnosticadas por el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológica (Indre).

La Secretaría de Salud informó que las cuatro mujeres tienen entre las 12 y las 28 semanas de gestación.

Indica que desde que se confirmó que las mujeres tenían zika, se “reforzó el control prenatal” y se realiza “la promoción de la salud para informar sobre los efectos que puede tener el virus del zika durante la gestación”.