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Ha pasado media década desde que Caifanes se reunió de nueva cuenta y este domingo la legendaria agrupación demostró que su regreso no fue momentáneo ni cuestión de nostalgia, pues las casi 19 mil personas que vibraron con su concierto en el Palacio de los deportes no pueden estar equivocadas.

Alfonso André, Sabo Romo, Diego Herrera, Rodrigo Pérez y Saúl Hernández contagiaron con su energética vibra a la audiencia mexicana que desde las 19:00 horas comenzó a llegar al Domo de cobre para que iniciara una hora más tarde el periplo musical del grupo con el tema “Los dioses ocultos”.

El viaje sonoro mezcló lo mejor de los 80 y los 90, pero también adaptó la nueva propuesta de Caifanes, quienes a pesar de rondar los 50 años demostraron que ser rockero es cuestión de actitud. Esto quedó constatado cuando ejecutaron himnos como “Para que no digas que no pienso en ti”, “Te estoy mirando” y “Miedo”.

Saúl Hernández agradeció desde los primeros temas la entrega de sus seguidores, quienes dijo, son responsables de que el rock mexicano no muera.

“Muchas gracias por siempre estar. Esto es un sueño, son ustedes los que logran que sitios como el Foro Sol o el Palacio de los Deportes parezcan rockotitlán, ¡Viva México raza!”, detalló Saúl Hernández.

Durante más de 120 minutos, los asistentes pudieron escuchar otros temas clásicos del grupo como “Nubes”, “Nada”, “Cuéntame tu vida”, “El negro cósmico”, “De noche todos los gatos son pardos”, “Detrás de ti” y “Amanece”, que no pudieron faltar en el recorrido musical.

Uno de los momentos más emotivos fue cuando Saúl Hernández se dirigió al público y les dedicó “Antes de que nos olviden”. “Amigos, raza, esta canción es sólo para ustedes, por que lo cierto es que ustedes son la verdadera realidad de este país, ustedes son los que día a día se la pasan partiéndose la madre”, dijo.

Antes de despedirse, la banda entregó “No dejes que...”, “Viento”, “La célula que explota” y “La negra Tomasa”.

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