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Un contador de historias poético como es Ismael Serrano complació a 2 mil 450 asistentes, de acuerdo con la cifra de los organizadores, en una intensa y
romántica velada que contó con una fantasiosa y creativa producción.

Con una reverencia, tomando su guitarra en las manos y ante los aplausos de su público el español salió al escenario a las 20:25 horas para interpretar
“Absoluto” y “Dónde estarás”.

Acompañado por cuatro músicos y una pantalla detrás creó un intervalo de ritmos tanto movidos como más tranquilos, hizo un conteo de los corazones
que latieron, las parejas que se enamoraron y hasta los nietos de las abuelas de Plaza de Mayo (en Argentina) que aparecieron antes de “Te vi”
seguida de “No estarás sola”.

“Tomemos un respiro, que a uno le afecta la altura; es todo un placer volver a México a presentar un disco nuevo”, expresó.

El ritmo continuó al presentar su álbum La llamada invitando a los asistentes a agarrar a sus parejas en “Bachata mediterránea”, por lo que más de uno decidió hacerle caso. La emoción y los cánticos se desbordaron en “Vértigo” y con sus propias manos jaló el cordón para bajar una tela blanca delante
de él que sirvió como proyector gigante mientras sonaba “Rebelión en Hamelín”.

Influenciado en la canción latinoamericana, los dragones se convirtieron protagónicos en “Peces de ciudad”. “Ahora que te encuentro”, “Recuerdo”, “Ya ves”, “Todo empieza y todo acaba en ti”, crearon un mágico ambiente ante gritos de “te amo” y “eres un chingón”.

Luego Ismael se fue, pero volvió para sus fans con y “Cien días”.

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