En agosto de 2017 el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), en coordinación con la UNICEF , publicó un “Breve panorama educativo de la población indígena ” mexicana. Este texto contiene información diversa sobre el contexto en que vive la población indígena, su dimensión educativa, la cobertura educativa, las condiciones escolares y los resultados de aprendizaje. Este panorama es una muestra del trabajo que realiza el INEE para monitorear el (in)cumplimiento del derecho a una educación de calidad en México.

La calidad educativa no puede analizase sin considerar que la igualdad es un derecho exigible que tiene todo ciudadano . Sin embargo, la igualdad por sí misma es insuficiente para revertir las diferencias sociales; por ello se requiere, como lo propone la UNESCO, que un país implemente políticas de equidad, que no es otra cosa que otorgarle más al que menos tiene. Es decir, un sistema educativo igualitario es aquél que distribuye proporcionalmente la misma cantidad de recursos a las escuelas ; mientras que en uno equitativo dicha distribución debe favorecer a las escuelas que atienden a poblaciones que se encuentran en condiciones de vulnerabilidad.

Como veremos a continuación, el sistema educativo mexicano , no solo es inequitativo , sino que es muy desigual , especialmente con las poblaciones indígenas . Destaco algunas cifras del panorama educativo antes referido para el año 2015. De los cerca de 120 millones de habitantes del país, 12 millones eran indígena y cerca de 7.4 millones hablaba una lengua indígena (HLI). Siete de cada diez HLI habitaban en poblaciones de alta y muy alta marginación. El Sistema Educativo Nacional ( SEN ) tenía cerca de 3.8 millones de indígenas. Sin embargo, solo la mitad de los HLI habían ingresado a la educación media superior (EMS), casi 20 puntos porcentuales por debajo de la población no indígena, cuya proporción era de 68%. De la población indígena de 25 a 64 años, 1 de cada 5 tenía la primaria incompleta, 1 de cada 4 contaba con la primaria completa y 1 de cada 10 había concluido la EMS. Los HLI de 15 años y más sólo tenían 5.7 grados promedio de escolaridad, a diferencia del resto de la población que contaba con 9.4.

La mayor parte de los estudiantes HLI asiste a escuelas indígenas , comunitarias o telesecundarias, en donde se tiene un menor acceso a computadoras e Internet para uso de docentes y alumnos. En el ciclo escolar 2015-2016 sólo 1 de cada 4 primarias indígenas contaba con al menos una computadora para uso educativo ; en las primarias generales la proporción era de doble.

El artículo 7º de la Ley General de Educación (fracción IV) establece que debe brindarse educación a la población indígena en su propia lengua. sin embargo, cerca del 10% de las escuelas preescolares y primarias no contaban con maestros que dominaran la lengua de sus estudiantes . Adicionalmente, una proporción importante de docentes indígenas no cuenta con la formación indispensable (licenciatura) para ejercer su profesión de manera adecuada.

Los resultados de las evaluaciones de aprendizaje realizadas por el INEE muestran que en las primarias indígenas cerca de 8 de cada 10 estudiantes no logró adquirir las competencias mínimas de lectura y de matemáticas : mientras que la proporción de estudiantes en las escuelas generales públicas fue cercana a 50 y 60%, respectivamente. Las enormes diferencias de logro académico entre estudiantes indígenas y no indígenas son aún más pronunciadas en secundaria y en EMS.

A pesar de que México cuenta con un marco jurídico constitucional muy robusto en materia de derechos de los indígenas (Artículo 2°, fracción B-II), la información que proporciona el panorama educativo de la población indígena muestra que no se está cumpliendo con lo estipulado en la Constitución , en el sentido que el SEN no le está garantizando a la población indígena el acceso a servicios educativos de calidad (lo que incluye una educación bilingüe e intercultural), el incremento de sus niveles de escolaridad y la adquisición de aprendizajes clave de la educación obligatoria.

Por ello, se requiere que el nuevo gobierno diseñe e implemente políticas públicas orientadas a mejorar la equidad de los servicios educativos de la población indígena. No es posible que en pleno Siglo XXI sigamos ofreciendo una mala educación a la población más vulnerable del país.


Presidente del Consejo Consultivo de Métrica Educativa, A.C.
Ex presidente de la Junta de gobierno del INEE

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses