En Twitter, los fanáticos de los Blue Jays han empezado a colocarle la etiqueta de as a Marco Estrada. Y dada la forma en la que el mexicano viene lanzando últimamente es fácil ver por qué.

Estrada tiró ayer el que probablemente ha sido su mejor juego de la temporada al permitir una carrera en 7.2 innings en la victoria por 3-1 sobre los Orioles. El veterano derecho de Toronto empató una marca personal con 12 ponches y, más importante aún, ayudó a que su equipo evitase una barrida de tres juegos en Camden Yards.

El nativo de Sonora tiene ahora marca de 3-2 y 3.30 de efectividad en 2017 durante los 62.2 episodios que ha lanzado. Ha otorgado 16 boletos y ha ponchado a 70 bateadores, mientras que su WHIP es de 1.13.

Una de las responsabilidades que conlleva el rol de as es poner la cara por el equipo cuando las cosas no están saliendo bien. Hay momentos en los que alguien tiene que enderezar el rumbo echándose al equipo al hombro. Estrada se está convirtiendo en esa persona en Toronto.

“Ha sido una maravilla desde que llegó aquí”, dijo el manager de Toronto, John Gibbons. “Siempre ha lanzado bien contra los Orioles y además, éste probablemente sea el parque más difícil para lanzar. Pero he visto a Marco hacer eso tantas veces y el equipo lo necesitaba después de un par de juegos difíciles. Es el tipo de cosas que hace”.

Estrada ha estado trabajando últimamente en su mecánica con el coach de pitcheo Pete Walker, pues había tenido algunos problemas durante su última presentación ante los Braves al irse hacia adelante demasiado rápido, lo que a su vez afectaba su cambio de velocidad.

El trabajo extra funcionó y el cambio volvió a mostrarse efectivo. Durante mucho tiempo, ese ha sido su lanzamiento clave, pues al viajar a una velocidad promedio de 77.8 millas por hora hace lucir mucho más rápida a una recta que no promedia más de 90 millas por hora.

“No es como si nadie lo estuviese esperando”, dijo el manager de los Orioles, Buck Showalter, sobre el cambio de Estrada. “Pero tiene un gran control de la recta, la ubica muy bien, y presenta el cambio perfectamente. Tú hablas con los bateadores y están pensando en el cambio. Lo están esperando. Tienes que escoger uno de los dos, el cambio o la recta, porque no le puedes pegar a ambos”.

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