Con golpes verbales, el entrenador Ignacio Beristáin noqueó las posibilidad de que su pupilo Juan Manuel Márquez cierre su carrera a fin de año, enfrentando al puertorriqueño Miguel Ángel Cotto.

El emblemático manejador señaló que Golden Boy, promotora de Cotto, no firmará ninguna pelea contra Márquez.

“[Juan] no va a pelear nunca con Cotto porque él está firmado con De la Hoya y nosotros no somos nada para De la Hoya. Esa [pelea] no puede ser y nunca pudo ser”, declaró Beristáin.

Don Nacho, entrenador de más de 25 campeones mundiales, recibió un homenaje por parte del Consejo Mundial de Boxeo, donde manifestó que Juan Manuel Márquez dará una sorpresa grata en su regreso a los encordados.

“Ha entrenado muy bien, muy fuerte, el día que suba al ring lo van a ver y se van a sorprender. Aunque los promotores están muy lentos, sería en el Estado de México o la Arena Ciudad de México”.

En marzo pasado, Márquez, campeón del mundo en las divisiones pluma, superpluma, ligero y superligero, condicionó su vuelta a los cuadriláteros para pelear con Miguel Cotto a que el puertorriqueño baje del peso mediano al welter, y que la cita no sea en Nueva York.

El capitalino, quien tiene 43 años de edad, no pelea desde el 17 de mayo de 2014, cuando derrotó al estadounidense Mike Alvarado.

Respecto a la relación que guarda con Julio César Chávez Jr., Beristáin comentó que tal vez no vuelvan a trabajar juntos por la forma en la que el Hijo de la leyenda lleva su vida fuera de los entrenamientos.

“No sé del Jr., sí he hablado con él... a lo mejor no [trabajar juntos otra vez] porque le gusta mucho la dolce vita y la disciplina aquí es militarizada, tiene que pensarlo”.

Al igual que Mauricio Sulaimán, presidente del CMB, Ignacio Beristáin mandó un mensaje de condolencias a Julio César Chávez por el asesinato de su hermano Rafael.

“Es algo muy lamentable. Yo soy amigo de Julio desde hace muchos años y conozco a parte de su familia. Triste al conocer la noticia”, comunicó don Nacho.

Beristáin convivió durante mes y medio con parte de la familia Chávez, cuando se enclaustró en el Centro Ceremonial Otomí para entrenar a Julio hijo, que en mayo pasado se midió en Las Vegas con Saúl Canelo Álvarez. 

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