Viene de una derrota ante un rival al que teóricamente debía vencer y enfrenta a una selección estadounidense que acaba de apuntarse una estrepitosa goleada. Súbitamente, las cosas se le complicaron a Panamá en las eliminatorias de la Copa Mundial de futbol.

El desafío para los "canaleros" es mayúsculo ya que nunca han podido ganarle a Estados Unidos en las eliminatorias. Los norteamericanos, por otra parte, también están necesitados de puntos.

Panamá cedió tres unidades importantes al caer 1-0 el viernes ante Trinidad y Tobago. Quedaron terceros con cuatro unidades, una más que Estados Unidos, Trinidad y Honduras, que comparten el último puesto. México lidera el hexagonal con siete puntos y Costa Rica lo escolta con seis.

Panamá solo suma un gol en las tres primeras fechas y echa de menos al veterano delantero Blas Pérez, un motor e ídolo en casa, que aún no se ha recuperado de una lesión muscular que lo marginó de la visita a Trinidad.

A juzgar por lo visto en los entrenamientos, el entrenador de los panameños, el colombiano Hernán Darío Gómez, saldría desde el vamos frente a los estadounidenses con dos delanteros, Gabriel Torres y Luis Tejada.

"No queda de otra, hay que apuntar al arco de Estados Unidos el martes", señaló el "Bolillo" Gómez, quien al mismo tiempo llamó a la afición a meterse como nunca en el partido.

Estados Unidos ejerce total superioridad sobre Panamá en la historia de las eliminatorias y le trae un triste recuerdo a su socio canalero: el revés con goles en los últimos minutos que le impidió avanzar a un repechaje en la última fecha del pasado hexagonal.

Estados Unidos viene en alza tras golear en su casa 6-0 a Honduras, después de perder sus dos primeros partidos contra México y Costa Rica, ante este último por paliza (4-0). El plantel que dirige Bruce Arena llega con cuatro bajas por lesiones, incluyendo al defensa John Brooks y al volante Sebastian Lletget que jugaron ante los hondureños.

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