La idea de contratar a Ricardo La Volpe no parece tan mala a los seguidores del América. Prefieren al agrio “Bigotón” que a Ignacio Ambriz, despedido de Coapa apenas el domingo pasado.

Aunque la fanaticada azulcrema hubiera elegido a una leyenda del club, sobre el argentino, algo así como tener en el banquillo a Carlos Reinoso, el máximo símbolo águila.

“Me gusta La Volpe, porque es uno de los entrenadores que les gusta ir al frente, que es como debe de jugar el América”, consideró antes de ingresar al Estadio Azteca, Aarón Muñoz, aficionado al equipo emplumado, acompañado de sus familiares.

“El equipo va a jugar y sobre todo esperamos que gane, que es lo que todos los aficionados pedimos siempre al club”, añadió el técnico en reparación.

A su llegada al “Coloso de Santa Úrsula”, el estratega argentino firmó autógrafos y concedió “selfies” a los asistentes que lo identificaron en uno de los túneles del recinto. Fue la forma en la que el relevo de “Nacho” comenzó a ganarse el cariño de la que será su afición.

Cuando el sonido local dio su nombre, el ambiente estuvo más cerca de la indiferencia que del reproche, como sucedió con Ambriz desde que se convirtió en el estratega americanista.

En cuanto sonó el silbatazo inicial, el argentino dio muestra de su hechizo, ya que a los cuatro minutos, América ya ganaba 2-0 a los Pumas. El técnico recién llegado apretó el puño en señal de felicidad.

La confianza y el respaldo a La Volpe tampoco es ciego. Hay un resquicio de duda y desazón entre los fieles amarillos. Había mejores opciones, según ellos, para que llegara a tomar las riendas de la escuadra 12 veces campeona del futbol mexicano. Era preferible un tipo de “casa”, tal y como Carlos Reinoso.

El chileno se candidateó mediante las redes sociales para relevar a Ambriz en el timón americanista. Sin embargo, Ricardo Peláez, presidente deportivo del equipo, se decantó por La Volpe, “por su madurez” y capacidad “de eliminar riesgos”.

“La verdad es que siempre alguien que se identifique con los colores va a hablar de lo que es el América en el vestidor”, evaluó Alonso Martínez, fan que porta una camiseta ochentera de las Águilas, con el nombre de Antonio Carlos Santos.

El América ha dado tumbos a lo largo del Apertura 2016, torneo en el que celebrará el centenario de su fundación. Llegó a la jornada 11 en la séptima posición, con 14 unidades.

Los números del ex seleccionador mexicanos son pobres desde que dejó al Tri. Coleccionó fracasos en el balompié argentino con Boca Juniors, Vélez Sarsfield, Banfield, y en México, con Monterrey, Atlante, Atlas, Guadalajara y Chiapas. Además de vivir el escándalo de presunto “acoso sexual” en contra de la podóloga de Chivas, Belén Coronado.

Aún así, el voto de confianza de la afición azulcrema al “Bigotón” está dado, pese a que no es “de casa”.

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