Fashion Profile: La musa atípica

En un tiempo en que las media models —jóvenes con millones de seguidores en redes sociales— dominan las pasarelas, pareciera no haber otros nombres más allá de Kendall, Gigi o Cara en el panorama. Sin embargo, basta con poner atención a los desfiles y campañas publicitarias del momento para identificar a una nueva generación que se está abriendo camino gracias a sus semblantes alejados de los convencionalismos estéticos.

Molly Bair, Lexi Boling, Issa Lish, Lineisy Montero, Ruth Bell y Binx Walton son algunas de las maniquíes que han hecho desus rasgos extraños y marcadas personalidades sus credenciales en la industria. De este grupo, Walton se ha convertido en la integrante más destacada, pues ha logrado acaparar los más importantes contratos de moda en un tiempo récord.

Su singular belleza, aunada a su carácter relajado, ha despertado el interés de propios y ajenos hacia ella. “La primera vez que la vi me enamoré de su aspecto tomboy; me pareció súper sexy  Binx es fuerte, inteligente y, pese a que sólo tiene 20 años, sabe  lo que quiere”, ha declarado el diseñador Olivier Rousteing sobre la top.

Diversidad al alza

Walton no es como la mayoría. Desde pequeña soñaba con dedicarse al futbol y se  distinguía del resto por su semblante, sobre todo por sus ojos saltones, rasgo que le valió el sobrenombre de ‘Binx’ por parte de sus hermanos, en referencia al personaje de ‘Jar Jar Binks’ de la saga de Star Wars.

A los diez años fue descubierta por un agente mientras estaba con su hermana en una alberca, pero fue hasta la edad de 17 que firmó su primer contrato como modelo. El debut de Leona Walton —su nombre verdadero— fue en desfile Otoño/Invierno 2013 del creador neoyorquino Marc Jacobs. La temporada siguiente, la top acumuló más de 30 desfiles en las principales capitales del mundo. Su carácter misterioso y apariencia andrógina la han convertido en un modelo de mujer real para las firmas, que hoy buscan exaltar la diversidad para conectar de esta forma con un gran número y diversidad de audiencias.

Su imagen la ha convertido en un modelo de mujer real para las firmas, las cuales hoy buscan exaltar la diversidad para conectar de esta forma con clientas de diferentes públicos. Está demostrado: las nuevas musas de los diseñadores desafían las normas a través de un atractivo único y, por si fuera poco, con altas dosis de actitud.