El mexicano Ignacio Jarquín dirige y protagoniza la puesta en escena “El regreso de Madame Butterfly”, a 30 años de la icónica obra de Puccini, con una actuación espectacular que se ganó el reconocimiento de la crítica británica.

El tenor y director musical protagoniza ocho papeles en este monólogo, donde canta, actúa, recita, baila y realiza artes marciales para contar la historia de Tomisaburo, el hijo de Madame Butterfly y Pinkerton, un oficial de la Armada estadunidense.

“Yo siempre me he preguntado qué le pasa a ese niño y con un lenguaje teatral más contemporáneo hice una secuela. Es una de las obsesiones que yo quise hacer como artista”, señaló Jarquín en entrevista.

“El regreso de Madame Butterfly”, es una ópera en dos actos escrita por el inglés Andrew G Marshall, con música de Michael Finnissy, que narra la historia de Tomisaburo que va a Estados Unidos en busca de su padre.

Al igual que el final trágico de Madame Butterfly (Ciocio-san) que se hace el harakiri, el destino de su hijo no podía ser un final feliz.

“La historia es una tragedia griega en el que cíclicamente el error que se cometió contra Madame Butterfly se repite, y finalmente se consigue una solución a ese drama cíclico para terminar con la injusticia que se ha creado en el mundo de Butterfly”, comentó Jarquín.

El artista mexicano define la obra como universal, una historia con la que la audiencia se puede identificar ya que puede reconocer las distintas coreografías con una influencia japonesa basadas en el teatro Noh, la tradición teatral más antigua del país nipón.

Explicó que a diferencia de Puccini “yo quise respetar más el ambiente japonés y lo que hice fue meterme a estudiar el teatro japonés Noh para poder dirigir y actuar esta puesta en escena”.

Jarquín, quien desde 1984 vive en Europa donde estudió en Viena y París, aprendió el baile tradicional japonés Nihon Buyo, y con sus dotes de tenor ha cautivado a una audiencia británica en el Teatro Landor, en el sur de Londres.

“Estoy tratando de crear una simbiosis para combinar el arte teatral musical del Oriente con el del Occidente y para mí la manera más íntegra de hacerlo fue el de respetar la forma exterior y por eso aprendí los bailes y los ritos del teatro japonés”, precisó.

Ignacio Jarquín, quien vive en Inglaterra desde hace 14 años, inició el proyecto a finales de 2012 con el apoyo del Consejo de las Artes de Inglaterra (Art Council).

“Un gran cantante y contador de cuentos natural” y “una actuación fenomenal” señalan dos críticos británicos sobre la obra que es un monólogo de un artista mexicano, el primero en escenarios ingleses en una temporada de tres semanas, que concluye el 22 de noviembre.

“A nosotros lo que nos interesa es el trasfondo psicológico, el arquetipo que se está generando. Madame Butterfly es una verdadera obra de arte que se comunica a través del tiempo”, subrayó Jarquín.

rqm

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