El débil crecimiento en las economías emergentes como China, Rusia y Brasil, generado por los bajos precios de las materias primas y la debilidad de la demanda de exportaciones, seguirá actuando como un lastre para el PIB mundial este año, coincidieron especialistas.

“Una desaceleración más pronunciada de lo previsto en la economía de China es en la actualidad uno de los mayores riesgos para la economía mundial. Un crecimiento más lento en China, la segunda economía más importante del mundo, podría tener un importante efecto en cadena en el crecimiento global mediante el aumento de la aversión al riesgo y el aumento gradual de tensión en mercados financieros”, advirtió en un análisis Moody’s Investors.

La economía de China se puede desacelerar gradualmente desde 6.9% en 2015 a alrededor de 6.3% en 2016, guiados por las políticas destinadas a impulsar el crecimiento, según el informe Global Macro Perspectivas 2016-17: una mayor debilidad en los mercados emergentes en medio de persistentes riesgos a la baja.

“China está en un reacomodo de su estrategia de crecimiento. A raíz de todas las reformas que hicieron en las últimas décadas que le permitió reducir niveles de pobreza e incorporarse a los mercados globales, busca sesgarse más a su mercado interno y servicios y trata de propulsar todavía más el consumo privado”, comentó James Salazar, analista económico de CI Banco.

Jorge Mariscal, jefe para inversión en mercados emergentes de UBS, aseguró que si hubiera de nuevo una desaceleración en la economía china, el problema del tipo de cambio regresaría al centro del debate de los mercados, y si se llegara a dar una devaluación importante del renminbi va a impactar a todos los mercados emergentes, lo que puede generar una volatilidad a escala global.

“Para México en particular es muy importante el renminbi, porque China compite con México en el mercado estadounidense en muchos sectores, en autopartes, en electrónicos, y esto obligaría probablemente a una depreciación adicional del peso mexicano.

Rusia. Este país que depende completamente del petróleo, le ha ido bien recientemente por esa mteria prima, pero en términos de reformas estructurales, de mejora de las instituciones, de inclusión social del ciudadano, ahí no ha habido ningún progreso, de hecho ha habido retrocesos, explicó el especialista de UBS.

Putin no ha dado ningún indicio de que quiera modernizar Rusia, es una economía muy dependiente de los commodities, del petróleo pero también del cobre y de oros metales, porque tiene una industria minera muy importante. Es una economía altamente volátil, estuvo en recesión el año pasado, probablemente tenga una pequeña recesión este año, explicó Mariscal

Brasil. Brasil está cerrando un capitulo muy doloroso de su historia con el impeachment, la remoción de Dilma Rousseff.

El PIB cayó 4% el año pasado y se espera que se contraiga entre 3.5% y 4% al cierre de 2016, lo que implicaría que su economía se contrajera casi 8% en dos años.

La caída de los precios internacionales de los commodities explican una parte de ese menor dinamismo en le país sudamericano, pero la mayor parte de la crisis se debe al mal manejo de la economía durante la administración de Dilma Rousseff, sobre todo el gran endeudamiento y el crecimiento explosivo del déficit, consideró Mariscal.

Google News

Noticias según tus intereses