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Quedarán 15 juegos por delante en la fase regular del Clausura 2017, mas Gabriel Peñalba está consciente que el de mañana contra los Pumas será distinto para el Cruz Azul. Aunado a la relevancia que le otorgan ambos pueblos, la confrontación en Ciudad Universitaria luce como el termómetro ideal para medir los avances del todavía joven proceso encabezado por el director técnico español Francisco Jémez.

“En cualquier terreno al que vayamos a jugar, trataremos de plasmar la misma manera de desempeñarnos”, sentencia el nuevo volante de contención celeste, en conferencia de prensa realizada posterior al entrenamiento del equipo. “Obviamente que conseguir estos tres puntos va a ser vital; primero, porque es un clásico; segundo, porque nos va a seguir manteniendo en la parte alta de la tabla, y tercero, porque nos va a demostrar a nosotros mismos dónde estamos parados, cómo tenemos que afrontar estos duelos”.

“Manteniendo nuestro estilo de juego y siendo agresivos vamos a tener más posibilidades de ganar que de sacar los otros dos resultados [igualada y descalabro]”.

Aunque eso no significa que la intensidad que pretenden mostrar sobre el lienzo verde del estadio Olímpico Universitario disminuya ante otros contrincantes.

El ex futbolista del Veracruz promete que La Máquina nunca se guardará un ápice de esfuerzo.

“Necaxa también era un parámetro importante. Acá, más que nada, depende de cómo estemos nosotros, las cosas que debemos hacer dentro del campo, si están bien claritas”, comparte el sudamericano. “Pumas es un rival importante, por lo que significa el clásico, pero es totalmente equivalente a todos los demás encuentros: te da tres puntos y el futbol mexicano es muy parejo, competitivo, cualquiera le puede ganar a cualquiera”.

“Hay que estar bien concentrado y saber lo que hay que hacer”.

Pese a que apenas será el segundo encuentro oficial con su actual entrenador, los Cementeros lucen en mejores condiciones que los universitarios, debido a la inversión realizada para este certamen. Ni siquiera eso es suficiente para aceptar la etiqueta de favoritos que sí agrada a los dirigidos por Francisco Palencia.

“En un torneo tan regular, como es el mexicano, porque las estadísticas lo marcan, cada partido tiene una matriz distinta a lo que sucedió antes. El favoritismo lo pone, más que nada, la prensa”, ataja Peñalba. “Obviamente, voy pensando en que ganaré, lo cual hace que me sienta favorito. Nos sentimos bien, físicamente a la altura...”.

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