Naucalpan, Méx.— Luego de sufrir la amputación de una pierna, hace unos días murió en el piso de un asilo de donde no hay camas, María del Rosario García García, de 72 años, quien esperaba el pago de sus ahorros que perdió en Ficrea para comprar sus medicinas, pues tenía cáncer.

María es una de 6 mil 800 ahorradores de Ficrea, 2 mil 800 de ellos adultos mayores del Estado de México, que hace 10 años —en noviembre de 2014— vieron esfumarse el patrimonio que forjaron para su vejez y que a la fecha no han recuperado su inversión, y en su mayoría están sumidos en la pobreza, con deudas y sin seguridad social, señaló Javier Paz Zarza, ahorrador y representante de los afectados.

A una década del quebranto, más de de Ficrea han fallecido en la pobreza, muchos sin dinero para comer ni para comprar medicinas, incluso en noviembre pasado murió Eugenia Torres, quien llevaba la lista de los decesos, lamentó Paz Zarza.

Lee también:

Reunidos en el Parque Naucalli, afectados mexiquenses relataron la angustia que es estar enfermos, sin atención médica y sin el dinero que forjaron en toda una vida de trabajo para su vejez, que hoy viven en condiciones de apremio y reiteraron su exigencia al gobierno federal de terminar con esta injusticia que los tiene al borde de la inanición.

Naria Guadalupe Sánchez era otra ahorradora de Ficrea que vivía en la parte alta de Ecatepec. Murió en 2023 en su casa y su familia no tenía dinero para sepultarla.

“Batallamos muchísimo, conseguimos una caja gratuita en el IMSS para poder enterrarla cuatro días después, una situación grave de miseria y desesperación a sabiendas de que hay recursos de su patrimonio que durante años su esposo y ella juntaron”, aseveró Paz Zarza.

Los afectados van a cumplir dos años sin recibir un peso de sus ahorros, de los cuales aún les adeudan 80% de su dinero, pues en 10 años “nos han entregado a cuentagotas migajas en pequeños pagos que apenas suman 20% de lo que invertimos en Ficrea, ahora ya ni eso”, apuntaron al unísono.

Al reunirse en el Parque Naucalli, demandaron al gobierno
federal a terminar con la injusticia y pagarles. Fotos: de Rebeca Jiménez. El Universal.
Al reunirse en el Parque Naucalli, demandaron al gobierno federal a terminar con la injusticia y pagarles. Fotos: de Rebeca Jiménez. El Universal.

“Están calentado el dinero”

“Hay dinero y recursos suficientes para pagarnos a los ahorradores, 100 millones del concurso mercantil, más 900 millones de pesos de un convenio que se hizo en Estados Unidos con Olvera Amezcua —el defraudador—, más 3 mil millones de pesos que tiene la Fiscalía General de la República en bienes incautados, monto suficiente para pagar 100% a los ahorradores, más los intereses serían 3 mil 500 millones de pesos, de los 11 mil millones de pesos que hay, quedaría un monto suficiente”, enumeró Paz Zarza.

“Hemos hablado cuatro veces con el director general del Instituto para Devolverle al Pueblo lo Robado. Ya reconocieron que hay recursos, que se puede lograr la subrogación, pero ha quedado en palabras”, lamentaron los ahorradores.

Los bienes están y el gobierno federal los puede tomar en garantía y pagar, como ofreció el presidente Andrés Manuel López Obrador, dijo el médico Alejandro Sánchez Almazán, de 64 años, sobreviviente de cáncer de colon, quien ha vivido de recursos propios y sin protección social. Los ahorradores “vivimos un quebranto de vida”, enfatizó.

La subrogación implica que todos los fondos que existen, que son más de 4 mil millones de pesos, más lo que tiene incautado la fiscalía, dinero en efectivo, cuentas de bancos, bienes materiales, arte, carros de lujo, yates de la persona que se dedicó a defraudar a la ciudadanía [con Ficrea]. Esos fondos que aún existen y con el mal manejo del síndico [responsable del concurso mercantil de Ficrea] Miguel Escamilla Villa, en complicidad con la juez 14 de distrito de nombre Virginia, no han querido dar avances en los procesos jurídicos para finiquitar la indemnización a los ahorradores, dijeron.

Lee también:

“Me han destrozado por completo”

“Ya no tengo ganas de vivir, me han destrozado por completo, física, moral y económicamente”, afirmó Salvador Quezada Cabrera, quien invirtió su jubilación, que logró como trabajador petrolero. “Me dejaron en la calle”, afirmó con impotencia el hombre de 81 años.

Patricia Cervantes Solís, de 73 años, es una de las cientos de viudas de ahorradores que, enferma, aún lucha por obtener lo que su marido ahorró, “lo que reunió por 45 años”, pues de la pena y la angustia “mi marido falleció al año de la quiebra de Ficrea”.

Pedro Aguilar, de 74 años, contó que el dinero que reunió en 50 años de trabajo y que perdió en Ficrea “no es una fortuna, pero era suficiente para vivir con dignidad”. Ahora sufre de estrés y presión alta.

“Sufrí dos parálisis faciales por el estrés y la angustia de perder mi inversión de toda la vida” que logró como trabajador independiente en su imprenta. Además, relató que tiene “la presión alta, azúcar y colon nevioso. No tengo dinero para comprar mis medicinas”.

Por “el robo de Ficrea del gobierno federal estoy en quiebra”, relató con enojo y lágrimas Fidencio Neri Domínguez, de 61 años.

Micaela compartió que su familia sufrió “un gancho al hígado” por el fallecimiento de su hermano Francisco Javier Torres Arguelles, quien fue ahorrador de Ficrea.

Murió en la calle por un infarto en 2020, producto de la angustia de perder su patrimonio, por lo que “no teníamos ni para el funeral”.

Roberto Sánchez Ortega, de 68 años, y su esposa Evangelina, quienes habitan en Ecatepec, reconocieron la angustia y desesperación en la que viven al perder sus ahorros y señaló que “lo que nos han pagado son migajas”.

Únete a nuestro canal ¡EL UNIVERSAL ya está en Whatsapp!, desde tu dispositivo móvil entérate de las noticias más relevantes del día, artículos de opinión, entretenimiento, tendencias y más.

Comentarios